Introducir Design Thinking en organizaciones tradicionales puede parecer una tarea difícil, una montaña demasiado inclinada para la que nunca se encuentra el tiempo suficiente para prepararse y comenzar a escalarla.

Cada organización se mueve en diferentes contextos y por tanto, tiene unos objetivos estratégicos diferentes, con equipos que han desarrollado skills específicos y por ende cualquier aproximación con Design Thinking, aún compartiendo una base común, debe personalizarse a la organización para la cual esta diseñada.

Pero… ¿Qué necesita una organización para hacer el salto de tradicional a innovadora? 

A continuación, encontrarás 3 razones importantes por la que dar el salto al Design Thinking vale la pena, los primeros pasos de un camino apasionante:  

✅ Ir más allá de la innovación incremental
Hay pocas organizaciones que hoy en día se estén lanzando a la piscina con proyectos que vayan más allá de la innovación incremental. Buscar innovación disruptiva es clave en el momento que vivimos y es una oportunidad de crecimiento si se aplica con efectividad.

✅ Superar el “miedo” a ser creativos
Muchas personas y organizaciones se consideran escasamente creativas. Hay organizaciones que, en relación con sus valores, modelos de negocio o estrategias se declaran ” poco o nada creativos”. ¡Es muy importante superar los sesgos y los miedos a ser creativos aún en entornos tradicionales! Existen muchas palancas organizacionales que podemos activar para llegar a desarrollar esta habilidad, una habilidad clave para el futuro según el World Economic Forum.

✅ Convertir los procesos lineales en curvas
Hay que perder el pánico del caos, al desorden o la falta de la organización. En ocasiones, debemos ser más tolerantes con las curvas y alejarnos de la secuencialidad programada de los procesos. Muchas veces matamos los procesos creativos queriendo enmarcarlos, medirlos y controlarlos demasiado. Invitar al desorden y aceptar un punto de caos para permitirle a tu equipo descubrir nuevas formas de encontrar valor más allá de las tradicionales es arriesgado pero imprescindible para las organizaciones que quieren ser realmente innovadoras.

Aquí tienes 3 primeros pasos, ¿Cuáles ya ha dado tu organización y cuáles le falta dar todavía? Cuéntanoslo en comentarios.